La Guerra de los Transgénicos -
¿Cómo los GMOs Impactan en la Ganadería y Salud Humana Alrededor del Mundo?
Por el Dr. Mercola
“Transgenic Wars” una película galardonada
por el francés periodista de investigación Paul Moreira, se aventura en un
viaje en Europa y América Latina para investigar los efectos de los cultivos
transgénicos (GM) tanto en la ganadería como en la salud humana
Además, esto profundiza en las preocupaciones
tangenciales, tales como un mayor uso de herbicidas de glifosato, atrazina y 2,4-D, el
último de los cuales fue un ingrediente en el devastador defoliante Agente
Naranja, utilizado durante la guerra de Vietnam.
Casualmente, Monsanto
era un productor líder del Agente Naranja durante la guerra, así como en sus
contribuciones para la guerra; que empezó con su participación en el Proyecto
Manhattan y creación de la bomba atómica, lo cual ayuda a explicar cómo
Monsanto ha logrado obtener tal apoyo incondicional de parte del gobierno de
los Estados Unidos.
Es una lealtad destructiva y a menudo
incomprensible, que continúa hasta nuestros días; donde el gobierno de los Estados
Unidos apoya, y participa en la difusión de los cultivos transgénicos (GE) y
químicos tóxicos de Monsanto alrededor del mundo--ahora reenvasados como
"necesarios" para la agricultura.
Monsanto, al ser un líder en semillas
transgénicas y productos químicos que las acompañan, recibe una parte justa de
atención durante toda la película. El ecologista Patrick
Moore, quien hizo la insólita transición de cofundador de Green
Peace a ser un defensor profesional de los transgénicos y grupo de presión, también
es representado allí.
En este sensacional video, que ha cosechado
más de 1.4 millones de visitas, Moreira sugirió a Moore beber de un vaso con
Roundup para probar su afirmación de que el herbicida es totalmente inofensivo.
La negativa de Moore, al decir que él ‘no es estúpido’, está incluida en la
película.
Porcicultores Daneses Luchan Contra
una Misteriosa Enfermedad Porcina
La película comienza en Dinamarca, donde los
criadores de cerdos luchan para determinar la causa de una misteriosa
enfermedad porcina, a la que se refieren simplemente como "la
muerte amarilla". La enfermedad causa diarrea violenta, y a menudo es mortal
para los cerdos afectados.
Prácticamente todos alimentan a sus cerdos
con soya transgénica, y muchos sospechan que esta podría ser el origen del
problema. Ib Pedersen es un criador de cerdos, desde hace mucho tiempo, en
Dinamarca.
Cuando empezó a alimentar a sus cerdos con
soya transgénica en los ‘80s, la mezcla contenía aproximadamente un 20 % de
soya transgénica. Con los años, la proporción aumentó, y para el año 2002, aproximadamente
el 90 % de la soya con la que alimentaba a sus cerdos era transgénica.
Al igual que otros agricultores, Pedersen se
esforzó por contener "la muerte amarilla", que mataría hasta un 30 %
de los lechones nacidos cada año, hasta que un día decidió eliminar la soya
transgénica de la mezcla con la que los alimentaba. Al cabo de dos días, los
cambios fueron notables. No había ni un solo caso de diarrea entre sus cerdos.
En los tres años que ha alimentado a
sus cerdos con piensos sin transgénicos, nunca se ha presentado de nuevo un
solo caso de "la muerte amarilla". Por sí solo, Pedersen logró
suscitar dudas entre los agricultores daneses, acerca de la seguridad de la
soya transgénica. Curiosamente, Pedersen podría haber identificado el problema
aún más minuciosamente. Ya que se dio cuenta de dos nexos intrigantes:
Cuando la soya
transgénica es adquirida de Argentina, todos los agricultores que la recibieron
terminaron con brotes de diarrea en sus cerdos. ¿Qué es lo que contiene esta soya
argentina transgénica que ha sido mucho peor que otras?
Encontró imágenes en Internet de niños argentinos deformados, que
médicos y científicos locales insisten son causados por la exposición a
plaguicidas, ya que muchos pobladores están rodeados de campos de transgénicos,
donde los productos químicos tóxicos son rociados con un deliberado abandono.
Le llamó la atención que tan similares eran
estas deformidades con las encontradas en sus cerdos. ¿La soya transgénica
contaminada con pesticidas podría ser la causa de los problemas de los
porcicultores?
La Soya Transgénica Destruye a
Argentina
Argentina es el tercer mayor productor de cultivos
transgénicos en el mundo, y el segundo mayor productor de soya transgénica. Este tipo
de cultivos han alterado radicalmente el aspecto del país.
Los cultivos transgénicos han eliminado la
necesidad de grandes fuerzas de trabajo en granjas, al erradicar pueblos
enteros y contribuir a la pobreza masiva.2 La diversidad agrícola que
Argentina usualmente presumía se ha ido, y en vez de ello fue reemplazada por
campos masivos de monocultivos de maíz, soya y algodón transgénicos.
Moreira visita Avia Terai, un pequeño pueblo rural, rodeado
de campos transgénicos. Aquí, los niños nacen con enfermedades raras y
degenerativas de origen desconocido. Una niña tiene grandes manchas de color
negro-marrón en toda la cara y cuerpo--marcas que ha tenido desde su
nacimiento.
Otro se atrofia lentamente por una enfermedad
degenerativa sin diagnóstico que se cree es genética, agravada por la
exposición a herbicidas. De una manera u otra, muchos de los niños están
deformados, y muchos de los ancianos mueren de cáncer.
Los aldeanos se refieren al Roundup de Monsanto como
"el veneno", y hacen todo lo posible por evitar ser rociados. Todos ellos
temen al tractor grande que rocía una de dos sustancias en el campo: agua o
herbicida, y no se sabe que es lo que rocía cuando lo hace.
Una mujer describe cómo se encierra ella y
sus hijos en el interior de su hogar, cada vez que oye al tractor. Aun así, es
difícil evitarlo cuando se encuentra rodeado de campos, y cuando lo que rocían
va a la deriva con el viento, al caer en el agua y en la ropa colgada para
secarse.
Los Agricultores Argentinos
Reconocen Que la Soya Transgénica No Puede Ser Utilizada Para la Alimentación
Animal
Es revelador, que un agricultor de
transgénicos que es grabado en secreto por Moreira indica que ellos no
alimentan a ninguno de sus animales con esta soya; "Si alimenta a sus
gallinas con ella, ya no podrá comer sus huevos", dice. Cuando se le
preguntó por qué, dijo que era debido a que los huevos huelen tan mal que no
pueden consumirse. Esta es la razón por la que toda su soya transgénica es
exportada.
Mientras tanto, los habitantes de los
alrededores sufren, al ser fumigados con regularidad. Los esfuerzos para
dialogar con los productores de soya transgénicos no han tenido ningún avance,
y las empresas propietarias de los campos son tan ricas, que las multas no las
disuaden de rociar generosamente dentro del perímetro ilegal de viviendas
residenciales.
En los 15 años que los cultivos transgénicos han sido
cultivados en Argentina, solo ha habido tres condenas por fumigación ilegal, a
pesar de ser un hecho común. En el caso de Avia Terrrai, el pueblo se encuentra a solo 200
metros (656 pies) del campo de soya transgénica.
Por ley, no está permitido utilizar pesticidas a menos de
1.5 kilómetros (poco menos de 1 milla) de las viviendas de los residentes.
Su situación no es única. De hecho, el
problema es tan grande, que el gobierno argentino estuvo obligado a
subvencionar centros de discapacidad producida por plaguicidas, para controlar
la cada vez más extensa crisis de salud.
Estos centros están llenos de niños de las
poblaciones donde los padres fueron expuestos a productos químicos agrícolas.
En general, la incidencia de los defectos de nacimiento es alrededor de 350 %
mayor en zonas donde se cultivan productos transgénicos, en comparación con el
resto de la país.3
Como fue señalado por una de las enfermeras
en un centro de discapacidad en Sáenz Peña, "Exportamos nuestra soya [GE]
a sus países para alimentar a los animales que consumen... Pero en realidad,
nosotros somos los que pagamos el precio por ello". La pediatra retirada,
Dra. María del Carmen Seveso va más allá al llamarlo genocidio, y decir que
esta situación es realmente grave.
Niños y Cerdos Deformes--¿Los
Herbicidas Son los Culpables?
Las imágenes de estos niños argentinos
deformes, publicadas en Internet, fue lo que llevó a Pedersen, el criador de
cerdos daneses, a analizarlo. Al igual que todos los demás criadores de cerdos,
también tuvo su justa parte de cerdos que nacieron deformes.
No le había puesto mucha atención, más allá
de reconocer que estas cosas ocurren de vez en cuando, pero las deformidades se
habían vuelto una situación más común, y de golpe se dio cuenta de las similitudes
entre las deformidades que vio en los niños argentinos que habían sido
expuestos a los pesticidas durante su gestación.
Cuando se trata de determinar qué pesticidas
son los culpables, hay muchas preguntas sin resolver. Al parecer, el glifosato
no es el único producto químico que es utilizado en los campos de soya
transgénicos en Argentina. A medida que las hierbas se vuelven resistentes y
crecen, muchos agricultores han recurrido a agregar otros productos químicos a
la mezcla, y no está claro quién utiliza que producto.
La acción sinérgica de los productos químicos
normalmente aumenta la toxicidad de la mezcla, en comparación con cualquier
producto químico determinado por sí solo, pero no se ha realizado ningún
estudio para determinar el nivel de riesgo exacto de los diversos brebajes.
Cuando Moreira se cruza con un tractor fijado
para rociar un campo, se da cuenta de que Monsanto no
solo rocía Roundup, sino también atrazina--que está prohibida en Europa, pero
es ampliamente utilizada en los Estados Unidos--y 2,4-D, uno de los principales
componentes de los herbicidas de las fuerzas armadas, el Agente Naranja,
utilizado ampliamente en las selvas, durante la Guerra de Vietnam.
Uno cosa está clara: La
promesa de que los cultivos transgénicos podrían producir una agricultura
"más ecológica" y un menor uso de productos químicos NO ha ocurrido.
En vez de ello, se utilizan cada vez más productos químicos en nuestra comida y
de igual forma también en la alimentación con la que crecen nuestros ganados.
Enemigos Mutantes
A medida que los cultivos transgénicos se han
apoderado de Argentina, las malas hierbas resistentes a los herbicidas se han
convertido en un grave problema.
En Argentina, se cultivan más de 30
millones de hectáreas (74.1 millones de acres) de soya transgénica, y el
glifosato es fumigado en cada campo, por lo menos tres o cuatro veces por año. Esto ha
producido toda una nueva clase de malas hierbas—unas que son resistentes al
glifosato, al igual que al propio cultivo transgénico.
Para abordar el problema, los agricultores no
solo aplican más pesticidas, sino que también mezclan diferentes tipos de
pesticidas juntos, para evitar que las malas hierbas se adapten a una sola
fórmula. Como resultado, usualmente se añaden de tres a cinco productos
químicos adicionales al glisofato. Además, las semillas transgénicas más
novedosas, están diseñadas para resistir combinaciones aún más tóxicas.
Como fue señalado en la película, no hay una
prueba definitiva de que los productos químicos agrícolas sean responsables de
la crisis sanitaria en Argentina; pero tampoco hay pruebas que demuestren lo
contrario. Y el gobierno no ha hecho nada para determinar la verdad.
De hecho, el gobierno de Argentina ha sido y
continúa siendo un gran apoyo para la industria de los transgénicos, y es algo
común ver anuncios de Monsanto en la televisión argentina, los cuales aseguran
a sus habitantes que sus productos son seguros y efectivos.
Mientras tanto, nunca se han realizado
estudios para determinar si todos estos cócteles químicos producen están
interacciones peligrosas o causan los problemas graves de salud que hoy en día
se observan en los niños criados en zonas agrícolas.
Asombrosas Cifras Elevadas de Cáncer
La única investigación organizada de manera
independiente acerca del impacto en la salud de los cultivos transgénicos, fue
realizada por estudiantes de la Universidad de Medicina de Rosario, que
encontró que las tasas de cáncer aumentaron un 40 % en una población, en un
solo año.
En otra población, la tasa de cáncer se
disparó a un 250 %. Lo que estas poblaciones tienen en común es que están
rodeadas de campos de transgénicos y la frontera de fumigación se encuentra
extremadamente cerca de donde se encuentran localizadas.
Por desgracia, la economía de Argentina ahora
depende totalmente de la agricultura transgénica. Según Alejandro Mentaberry
del Ministerio de Ciencia, Argentina obtuvo alrededor de US$ 65 billones de los
cultivos transgénicos entre 1996--el año que se introdujeron los cultivos
transgénicos--y 2011. Mentaberry cree que el país debe su "milagrosa
recuperación económica" a la exportación de cultivos transgénicos.
Pero ¿qué precio tendrá esta milagrosa
bonanza económica? En abril de 2014, los argentinos salieron a las calles de
Córdoba para protestar contra Monsanto y el uso de sus productos.
"¡Monsanto fuera! ¡Si a la vida, no a Monsanto! Monsanto es veneno.
Monsanto es la corrupción", coreaban las personas mientras
marchaban por las calles.
La película examina los poderes políticos que
apoyan y dirigen los países para que acepten estos productos transgénicos
(GMOs). Por ejemplo, Wikileaks reveló cómo los funcionarios del gobierno de los
Estados Unidos realizan en secreto el trabajo sucio de la industria de la tecnología
química, al convencer y amenazar a los gobiernos con represalias, según sea
necesario.
De igual forma, los funcionarios del gobierno
del Reino Unidos fueron captados fungiendo como grupos de presión y portavoces
de la industria de los transgénicos.
Asimismo, los acuerdos comerciales
transatlánticos fueron dispuestos para desmantelar cualquiera de las
prohibiciones que quedaban contra el libre flujo de los transgénicos y
productos químicos tóxicos en Europa, donde las leyes de protección para
la salud humana y el medio ambiente son más estrictas que en los Estados
Unidos.
En función del resultado final de estos
acuerdos, es posible que ningún país sea capaz de oponerse a los transgénicos
en el futuro, sin importar el costo humano o del medio ambiente.
Patrick Moore y el Arroz Dorado
Moore, un ex activista de Greenpeace, se ha
convertido en un prominente adversario del movimiento contra los transgénicos.
Según Moreira, Moore dejó Green Peace hace 30 años en malos términos, y desde
entonces se ha creado una reputación por sí mismo como un defensor de todas las
cosas contra la naturaleza, incluyendo la industria nuclear, de la minería y
transgénica. "Además piensa que el calentamiento global es excelente para
el planeta", señala Moreira.
Él ha sido el principal defensor del Arroz
Dorado transgénico, diseñado para contener altas cantidades de betacaroteno,
aparentemente para combatir la deficiencia de vitamina A en los países del
Tercer Mundo. Sin embargo, hay problemas. Para empezar, el betacaroteno es una
vitamina liposoluble.
De acuerdo con el Centro médico de la
Universidad de Maryland, se necesitan al menos 3 gramos de grasa para asegurar
que los suplementos de betacaroteno sean absorbidos.4
Este arroz enriquecido es destinado a los
países empobrecidos donde las grasas alimenticias son casi imposibles de
conseguir con cierta regularidad, lo que ocasiona que, en el mejor de los
casos, este tipo de suplementación sea inútil.
También, se desconoce si el betacaroteno del
Arroz Dorado puede mantenerse durante el almacenamiento, entre las temporadas
de cosecha, o si los métodos de cocción tradicionales utilizados para preparar
el arroz destruirán el betacaroteno. Finalmente, e igual de importante, este
arroz todavía se encuentra en desarrollo, y por lo tanto, todas las
reclamaciones son poco más que vanas ilusiones.
Tales hechos deberían haber detenido la
fantástica historia del Arroz Dorado desde el primer momento, pero esto tampoco
ha detenido el agrado de Moore por invertir mucho tiempo y esfuerzo en
promoverlo, que compara la negativa de Aprobar el Arroz Dorado por el genocidio
y la oposición de Green Peace al arroz como "un crimen contra la
humanidad".
Para Construir Un Sistema
Alimenticio Más Saludable y Seguro, Empiece en su Hogar
Los problemas podrían parecer insuperables,
pero hay soluciones. El hecho en
cuestión es que los agricultores no tienen que utilizar cócteles químicos para
producir la suficiente cantidad de alimentos. Muchas zonas
necesitarían una seria intervención para mejorar y reconstruir la calidad de
los suelos, que ha sido destruida por décadas de agricultura mecanizada y
productos químicos, pero esto se puede lograr.
Como habitante, puede ayudar a orientar la
industria agrícola hacia sistemas más seguros y sostenibles al cultivar sus
propios alimentos y comprar--lo que no puede cultivar--a agricultores locales
de confianza.
Por el momento, los alimentos procesados son
los más propensos a contener ingredientes transgénicos, por lo que al no
adquirir alimentos procesados de cualquier tipo, incluidos los condimentos, es
una de las mejores maneras de evitarlo—así como a los cócteles químicos
rociados en estos cultivos.
Si todos nos negáramos a comprar productos
que contengan transgénicos, e insistiéramos en alimentar a nuestras familias
con alimentos libres de pesticidas y transgénicos, la industria alimenticia no
tendría más remedio que responder. No pueden continuar haciendo negocios si las
personas no adquieren sus productos, y si las empresas alimenticias se niegan a
comprar ingredientes transgénicos, la industria de la biotecnología química
perderá su poder financiero para corromper y manipular a los gobiernos.
Esto solo es un efecto de filtración masiva,
y las masas realmente tienen el poder, a pesar de que a Monsanto y sus aliados
les gustaría pensar lo contrario.
Hay una forma de solucionar este desastre, y
comienza con cada persona que realiza diferentes decisiones de compra, para
ellas y sus familias. Aunque en la actualidad muchas tiendas de alimentos
ofrecen alimentos orgánicos, es preferible obtenerlos de productores locales,
siempre que le sea posible, ya que gran parte de los alimentos orgánicos son
ofertados en tiendas de alimentos importados.
Si vive en los Estados Unidos, las siguientes
organizaciones pueden ayudarle a localizar alimentos agrícolas frescos:
EatWild.com
Eat Wild ofrece listas de los
agricultores orgánicos certificados conocidos por producir productos lácteos
crudos, seguros y saludables, así como la carne de res alimentada con pasto y
otros productos orgánicos.
También puede encontrar
información sobre los mercados de agricultores locales, así como las tiendas y
restaurantes locales que venden productos de animales alimentados con pasto.
Weston A.
Price Foundation
Weston A. Price tiene capítulos locales en la
mayoría de los estados, y muchos de ellos están conectados con clubes de
compra, en los cuales se pueden comprar fácilmente los alimentos orgánicos,
incluyendo a los productos lácteos como la leche cruda y la mantequilla.
Grassfed Exchange
Grassfed Exchange tiene una lista de
productores que venden carnes orgánicas y de pastoreo a lo largo de los Estados
Unidos.
Local Harvest
Este sitio web le ayudará a encontrar los
mercados agrícolas, granjas familiares y otras fuentes de alimento producido de
manera sostenible en su área, donde se pueden comprar productos, carnes de
animales criados con pasto, y muchas otros bienes alimenticios.
Farmers'
Markets
Una lista nacional de los mercados de los
agricultores.
Eat
Well Guide: Wholesome Food from Healthy Animals
EatWellGuide es un directorio en línea de
carnes de animales alimentadas con pasto de forma sostenible, aves de corral,
productos lácteos y huevos de las granjas, tiendas, restaurantes, posadas y
hoteles, y puntos de venta en línea en los Estados Unidos y Canadá.
Community
Involved in Sustaining Agriculture (CISA)
CISA está dedicada al mantenimiento de la
agricultura y a promover los productos de granjas pequeñas.
FoodRoutes
El mapa de FoodRoutes "FindGoodFood”
(Encuentre Buenos Alimentos) puede ayudarle a conectarse con los agricultores
locales para encontrar los alimentos más frescos y apetitosos posibles. En su
mapa interactivo, puede encontrar una lista de agricultores locales, CSA, y los
mercados de su zona.
The Cornucopia Institute
El Instituto Cornucopia mantiene una
clasificación de herramientas web de todas las marcas orgánicas certificadas de
productos lácteos, huevos y otros productos básicos, en función a su suministro
ético y las prácticas agrícolas auténticas que separan a la producción “orgánica”
CAFO de las prácticas orgánicas auténticas.
RealMil.com
Si todavía no sabe donde
conseguir leche bronca o sin pasteurizar, revise las páginas Raw-Milk-Facts.com
y RealMilk.com. Ellas le indicaran los lugres donde pueden conseguir leche
legalmente en su estado y le proprocionan una lista de las granjas que venden
productos lacteos sin pasteurizar en su area. Tambein puede encontrar
información sobre leche sin pasteurizar en su página “facts about real raw
milk” .
Farm to Consumer Legal Defense Fund5 también
proporcionan una revisión de las leyes de la leche sin pasteurizar en cada
estado.6 Los residentes de California también pueden encontrar vendedores
minoristas de leche, con el uso de un localizador disponible en
www.OrganicPastures.com.
Fuente:
mercola.com